Medio ambiente: que nuestro país sea muy poco influyente en el cambio climático global y que todavía pueda hablarse de Uruguay natural no nos libera de responsabilidad sobre el tema. Al contrario, conociendo los desastres globales ocurridos, tenemos que aprovechar las ventajas comparativas y salvar nuestro ambiente así como pensar nuestro desarrollo desde esa perspectiva, sin atajos ni relativizaciones que pagarán mañana nuestros hijos y nietos.
No se resuelve con eslóganes radicales contra todo lo que sea empresas y capitalismo sino con audacia responsable, sabiendo las restricciones existentes, teniendo normas firmes e ideas fundadas.
Queremos inversiones nacionales y extranjeras; con el estado solo no alcanza, más allá de su imprescindible papel rector en la orientación del proyecto nacional, su rol regulador y democratizador, garante de los derechos de los más débiles y responsable del medioambiente.
Como todo, no alcanza con la coerción estatal. Sin la exigencia ciudadana, la concientización respecto al cuidado colectivo e individual de nuestra casa común, no habrá leyes que resuelvan un hábitat cuidado.ividual de nuestra casa común, no habrá leyes que resuelvan un hábitat cuidado.
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